En clave de humor, pero con mucha verdad de fondo, la nueva campaña de Coca-Cola vuelve a insistir en la necesidad de centrar nuestros esfuerzos en disfrutar de la vida. De la vida real, no la virtual. Y es que los datos apuntan a que el mundo dedica 4 millones de años a navegar por Internet y las redes sociales cada mes. Y, claro, es normal que en el proceso nos perdamos momentos de la vida tan importantes como una puesta de sol, una reunión con amigos, la sonrisa de nuestros hijos o la gracia de una mascota. Para evitar este desastre Coca-Cola, de la mano de Memac Ogilvy, nos propone el uso del Social Media Guard, un gigantesco collar que impide la consulta de los dispositivos móviles.