La clásica marca de turrones, tras 15 años con la misma imagen, ha actualizado el aspecto de sus envases para afrontar con éxito los nuevos retos y oportunidades a los que se enfrenta
Con el fin de lograr con éxito sus estrategias de expansión y de desestacionalización, el Almendro ha refrescado su imagen diseñando, con la ayuda de Interbrand, una nueva identidad gráfica que transmite al mismo tiempo valores tradición y actualidad, de experiencia y frescura, de calidad y cercanía.
Borja Borrero, Director Creativo de interbrand indica elevar la imagen de El Almendro al nivel de su calidad ha sido nuestro objetivo.
Además, como explica Chema León, miembro del equipo creativo involucrado, este proyecto ha supuesto un gran reto, buscábamos una imagen actual, atractiva para el mercado internacional y que respetase y potenciara los valores artesanales y de calidad que la marca ha ganado desde que comenzó su andadura en 1883.
El cambio, que se ha realizado con gran minuciosidad para mantener la identidad y reputación lograda por El Almendro durante tanto tiempo, le ha dado a la marca una imagen más contemporánea y limpia.
Los principales cambios realizados, como se puede apreciar en la imagen, han sido:
Rediseño de la marca, estilizándola para optimizar la legibilidad.
Refuerzo de la importancia del árbol como elemento gráfico, apareciendo ahora como fondo de los envases y recreando distintas localizaciones por la disposición de los almendros que, con la nueva imagen, reposan sobre un horizonte.
Rediseño del sello, más actual y contemporáneo.
Creación de nuevos envases para potenciar la desvinculación del periodo navideño y el consumo de turrón a modo de snack, con formatos más pequeños y envases individuales. También se ha intentado dar un mayor atractivo al producto introduciendo en el envase ventanillas transparentes u otros elementos.
Leve variación del código de color, introduciendo una mayor calidez cromática e incorporando un leve degradado. El respeto de la gama de color crema ha sido fundamental para mantener la fuerza del lineal y su reconocimiento por parte de los consumidores.
En la fotografía, mayor naturalidad en los cortes y mejoras en la composición y en la luz, resultando el producto más apetitoso y natural.
Introducción de una textura gráfica en el lateral que transmite mayor calidad y refinamiento al envase.
Con esta nueva imagen, El Almendro es hoy más que nunca una marca que puede luchar con éxito contra sus competidoras habituales y los gigantes internacionales que se están introduciendo en el sector.
Como indica Borja Borrero, El Almendro, una de las marcas más queridas y de más significado para los españoles, ejercerá de embajadora ante el mundo de uno de los productos más típicos de nuestro país.
