Esta semana la vlogger Brooke Amelia Peterson publicó en YouTube un vídeo en el que visitaba a su padre, un ingeniero de Apple, en el campus de la compañía californiana. El vídeo ganó una inmensa popularidad por las imágenes que mostraba del nuevo iPhone X, aún no disponible para el público.
La viralidad fue una completa sorpresa tanto para la youtuber como para Apple, que tan pronto como supo de la repercusión del vídeo exigió su eliminación. El resultado fue el despido del padre de Brooke en virtud de la violación de una regla sobre la difusión de contenido.