Un equipo multidisciplinar como el que conforma la firma Visual Thinking nos ha ayudado a conocer más de cerca qué es lo que está ocurriendo en el mundo de la comunicación visual. Las empresas han descubierto un nuevo diamante que es un viejo conocido en el mundo del diseño: las infografías. Y así nos lo cuentan desde esta empresa que lleva cuatro años trabajando en este campo para clientes de diferentes sectores.
Eduardo Cruz Ortiz, Miguel Elizondo, Miguel Gómez y José Luis Tascón conforman un equipo que, tras cerrar una una intensa etapa profesional en La Gaceta de los Negocios, decidieron apostar por dar valor a la comunicación visual empresarial, dentro de la complejidad que estas tres palabras conllevan. En palabras de Cruz, una vez cerrada nuestra etapa anterior en el periódico, nos dimos cuenta de que existía un interesante hueco en lo que a traslado de trabajos de infografía a la comunicación empresarial se refiere, tanto a nivel interno y externo. En 2008, cuando constituimos la firma, esta labor no estaba tan de moda como ahora, pero sí logramos ver, por datos en otros países, que existían ya casos de éxito en este tipo de proyectos.
La presencia en un periódico económico es una experiencia que abre muchas puertas de empresas, y los proyectos no tardaron en llegar. La evolución de las diferentes áreas de negocio de la compañía se ha ido empapando de una progresiva digitalización, a lo que habría que añadir la alusión de uno de los fenómenos más interesantes a los que hemos asistido en los últimos años en la Red, los tower graphics, que son básicamente infografías para blogs o sites, algo que les ha obligado a darle una importancia cada vez mayor al área online. Según Elizondo, manejamos unos porcentajes de encargos digitales de entre un 60% y un 70% de los proyectos que realizamos. Y algo importante: nos hemos dado cuenta de que el término online no significa algo obligatoriamente interactivo. Actualmente la digitalización de la infografía aprovecha las capacidades de las pantallas para narrar algo de una manera cómoda, ya que no es lo mismo contar algo en una doble página que en un scroll. Otro fenómeno que también hemos observado es que la mitad de nuestros proyectos cuentan con adaptación a tablets desde su arranque. Hemos dado el salto a estos dispositivos que son ya una herramienta profesional, corporativa y comercial. La comunicación va al ritmo que te permiten estas nuevas tecnologías.
El cliente y sus razones
Las empresas tienen claros cuáles son sus problemas, pero lo que no tienen claro es la solución. Las dificultades que encuentran las compañías en labores de comunicación no son pequeñas, razón por la que es una necesidad elaborar una actividad más eficaz y más atractiva en este sentido. La infografía te capta desde un comienzo, es atractiva y, una vez lograda tu atención, si contiene datos relevantes, te atrapa. Estas fortalezas pocos formatos de comunicación la tienen. Lo observamos en Twitter, donde ya se manejan datos como que los tweets con infografías se retuitean un +500% que los que contienen imágenes o texto según algunas consultoras, en palabras de Elizondo, quien añade que hay ocasiones en las que los datos que se quieren comunicar no se pueden trasladar a una infografía. Está claro que, con un sencillo paseo por la web, te encuentras muchos ejemplos pero también con otros trabajos que son sencillamente una suma de gráficos. En esta cuestión sí es cierto que enseñar al cliente es clave.
Desde la experiencia de Visual Thinking, la cartera de clientes tradicional ha experimentado también importantes cambios. Las empresas más ligadas a los comienzos de la compañía provenían del mundo editorial y de la construcción y servicios, con unos negocios muy ligados a las infografías tradicionales. Pero, pasado un tiempo, han ganado mucho peso en la cartera de clientes las firmas tecnológicas y las financieras. Y, dentro de estos proyectos, otro porcentaje aclarativo: aproximadamente un 50% de los proyectos son destinados a labores de comunicación interna empresarial mientras que la otra mitad se dirige a comunicación externa. Además, se está produciendo un fenómeno nuevo, según nuestros entrevistados: los departamentos de comunicación han pasado a ser un eje importante dentro del organigrama de las empresas y se sientan con las presidencias, dotadas además de capacidad decisoria. En España hay una necesidad muy grande de crear contenidos de calidad en las grandes corporaciones. Estamos dejando atrás una etapa dorada de la publicidad a favor de la comunicación, añade Elizondo.
Una revolución exigente
Existe un fallo de raíz como en todas las modas: en la abundancia no todo es bueno. Para Cruz, la calidad de los gráficos en un alto porcentaje no es muy grande. En este aspecto, las propias empresas están aprendiendo que no sólo basta con que un gráfico sea bonito, sino que es necesario que tenga un mensaje interesante.
Dentro del mundo de la comunicación visual, el formato de video-infografía es un paso natural que ya se ha adquirido, pero se sigue trabajando también con formatos interactivos en Flash y HTML5, aspirando además a una integración de disciplinas.
Y, en cuestión de temáticas, encontramos infografías de todo: desde las que informan acerca de los usuarios de Twitter hasta las que hablan del mundo de la moda. Pero existe un campo muy interesante, el del análisis del Big Data. Si las compañías tienen información sobre sus clientes y cruzan sus bases de datos para obtener una serie de claves, también es importante trasladar ese análisis sistémico a comunicación visual. Hoy es importantísimo conocer las herramientas de visualización de datos que nos ofrece el mercado para desarrollar nuevos proyectos, afirma Cruz.
