McDonald's ha puesto en marcha en sus restaurantes de Singapur la llamada "Happy Table", un juego interactivo con el que los niños podrán pasárselo en grande mientras disfrutan de su comida. Y es que, gracias a unos sensores con tecnología NFC instalados debajo de las mesas, éstas se convierten en un circuito de coches virtual donde los niños pueden jugar con sus smartphones. Cada sensor despliega un tramo de carrera retando a los niños a participar en juegos e historias animadas.