En un comunicado lanzado en su página web, Microsoft ha anunciado la compra del negocio de Nokia por 5.440 millones de euros: 3.790 millones de euros por la unidad de fabricación de móviles, cada vez más rezagada frente a sus competidores, y 1.650 millones de euros por la cartera de patentes de Nokia. La operación concluirá a principios del año 2014, después de la aprobación por parte de los reguladores estatales y los accionistas. Será entonces cuando 32.000 empleados de la compañía finlandesa pasarán a trabajar para Microsoft, según ha informado la BBC.
El paso dado por Microsoft es similar al que dio Google al comprar el fabricante de teléfonos Motorola en 2011, en un sector tecnológico cada vez más integrado y en el que dispositivos portátiles, sistemas operativos, aplicaciones y otros servicios cada vez están más concentrados para competir. Según indicaba Steve A. Ballmer, consejero delegado de Microsoft, "se trata de un ambicioso paso para el futuro, una situación que beneficia a ambos, a los empleados, a los accionistas y a los consumidores. Los dos equipos juntos acelerarán la cuota de mercado de Microsoft y sus beneficios en teléfonos". Cabe señalar que Stephen Elop, hasta ahora consejero delegado de Nokia y antiguo jefe en Microsoft, volverá a su antigua empresa, con lo que se perfila como posible sucesor de Ballmer.
Nokia no ha podido subirse al tren de los smartphones y tabletas electrónicas a tiempo, frente a Apple y Samsung, y se ha visto obligado a despedir a unos 20.000 empleados y eliminar algunas de las primas de sus trabajadores, según informa EFE. En el segundo trimestre de este año anunció una caída de la venta de móviles del 27% y unas pérdidas acumuladas en los últimos nueve trimestres de 5.000 millones de euros.
