1. La televisión ha dejado de ser un electrodoméstico y algo convencional para ser un foco global de atención.
2. Las agencias están fascinadas y asustadas por el contenido que surge de YouTube pero, frente a lo anterior, también la demanda de contenidos de calidad va en aumento (hay series con mayor presupuesto que muchas películas).
3. Netflix es una compañía tecnológica y acapara Big Data para ofrecer menús personalizados a sus suscriptores.
4. La televisión se ha democratizado, ya que hay más facilidad de recepción y emisión de contenidos.
5. Hablemos de cifras: Netflix gastará en un año 6.200 millones de dólares y Amazon casi 6.000, en total alrededor de 30.000 millones de dólares en mercado americano.
6. Las networks tradicionales están por encima de Netflix en inversión y también van a pisar fuerte en el streaming bajo demanda, aunque la primera cuenta con la baza de ser una empresa netamente tecnológica, una mayor diversificación geográfica y las bazas de la creación propia.
7. Hay que estar muy atentos a la irrupción de Amazon y Facebook en la industria del contenido, ya que tienen mucho dinero y una gran cantidad de Big Data. Y todo esto por no hablar de los grandes operadores de tecnología, que se están posicionando.
8. El anunciante ha perdido importancia en la producción de grandes contenidos.
9. El futuro de los contenidos es brillante.