ClubHouse tiene ese elemento adictivo de los podcast, pero elevado a la enésima potencia que genera el poder del directo y la participación y es que el streaming da la sensación de que convierte un relato en verdadero, en auténtico y lo diferencia del cuidado y bien producido podcast, que ya se ha ganado un hueco propio en nuestro (cada vez menor) tiempo y espacio para los contenidos.
Parte de la base de lo que entendemos por comportamiento humano y que tanto engancha: “escuchar y ser escuchados” pero con un ingrediente más que pocas veces falla, la exclusividad, el de entrar en un entorno donde no todo vale, al que no todo el mundo tiene acceso… El concepto “CLUB” es una eficaz trampa que te muestra esta red social como algo aspiracional y exclusivo. (un minuto de silencio para todos los que se peleaban por formar parte de “Asmallworld) ¿Cuánto durará la exclusividad cuándo empiece a monetizarse el modelo?
Otro de los elementos clave de ClubHouse es el tener un hueco más allá de estereotipos, no es la red social de los jóvenes, ni de los mayores, la de los deportistas o celebrities… ClubHouse es un espacio donde las personas hablan de las cosas que le interesan con otras personas.
Pero además evidencia una realidad que forma parte de las conversaciones a diario…¿necesitamos una alternativa a la cantidad de información visual? ¿Nos hemos cansado de las videollamadas de 4 horas y del postureo de instagram? De momento hay como mucha improvisación y naturalidad en las conversaciones, pero a mayor relevancia, audiencia y posibilidad de rentabilidad... ¿iremos viendo que las conversaciones se encorsetan y se vuelven menos relajadas?
ClubHouse ha logrado el primer objetivo, las personas… pero ¿qué pasará cuando las marcas acechen? ¿Tendrán hueco las mismas como lo han tenido en el resto de redes? Todo indica de que así será… bajo estrategias de #contenidos, #audiencias, #propósitos y #valores, el discurso está asegurado. Otra oportunidad para las marcas de tener un mensaje cualitativo vs el cuantitativo, para llegar a audiencias específicas, con opinión, criterio y micrófono abierto para darte su punto de vista. (“siempre positivo, nunca negativo”)
De momento los medios (la radio) se están acercando y jugando a tener una doble ventana… (huele a audiencias), pero de la misma forma, redes como Facebook y Twitter están preparando el lanzamiento de su propio sistema de audio… (la red de Mark Zuckerberg tardó pocos días en ponerse a trabajar en ello).
Sólo el tiempo determinará si el hueco del audio, sus salas, y sus moderadores (van a ser claves en la evolución del modelo cuando lleguen los haters de lo social) se propagarán como los Stories siendo una funcionalidad más o se hará fuerte y sobrevivirá como plataforma.
Estaremos atentos desde dentro para entender cómo evoluciona el modelo y poder aprender todo lo que pase alrededor y compartirlo.
ClubHouse, es la novedad del momento… un club/red social de audio donde compartir conocimiento está bien, pero comentarlo, mucho mejor.
